
¿Te han hecho un cobro en tu tarjeta de crédito que no reconoces? No estás solo. En Ecuador, esta situación se está volviendo cada vez más común, y no precisamente en bancos pequeños o privados. Hoy quiero contarte algo que presencié personalmente y que me dejó helado.
Mi visita al banco terminó siendo una alerta
Fui a uno de los bancos más populares del país, a averiguar sobre la emisión de una tarjeta de crédito. Mientras esperaba, noté que tres personas diferentes estaban reclamando por cargos no autorizados en su tarjeta de crédito. ¡Tres personas el único día que fuí a ese banco!
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Una de ellas fue la que más me impactó: una señora había recibido un cobro de 100 dólares a Facebook, supuestamente hecho hace tres años. Lo insólito es que el banco le cargó esa deuda y los intereses acumulados desde entonces, cuando la señora ni siquiera había abierto el sobre de esa tarjeta. Sí, la tarjeta era nueva y el sobre estaba completamente sellado. ¿Cómo es posible que se le cobre algo que no ha usado?
El banco respondió que podría tratarse de un cargo recurrente, lo cual no tiene sentido, porque para eso ella habría tenido que reingresar la tarjeta en el sistema de pagos de Facebook, cosa que nunca hizo. A ella le recomendaron acudir a la Defensoría del Cliente en la Superintendencia de Bancos.
Cuidado con las estafas
Tal vez esto no tenga que ver mucho con el banco en sí, pero debes tener mucho cuidado cuando exhibas tu tarjeta de crédito. He oído de estafas donde te visitan en casa como supuestos asesores del banco y con un poco de ingeniería social y sin que te des cuenta, pueden hacerte sacar tu tarjeta de crédito y tomarte fotos de la misma. Eso es lo único que necesitan para comprar en línea a tu nombre. Por esa razón siempre es buena idea borrar el código CVV detrás de la tarjeta y guardar esta información en otro lugar.
No es un caso aislado
Esta situación no es nueva. Ya he tenido experiencias similares con una empresa de telecomunicaciones, también importante en el país, que registraba llamadas de cientos de dólares a números desconocidos, y que nunca supo justificar. Y lo más grave es que muchos de estos cobros nunca fueron investigados a fondo.
¿Qué puedes hacer si te sucede?
- Revisa constantemente tu estado de cuenta. Usa la banca móvil o en línea para identificar cobros no reconocidos.
- Reporta inmediatamente cualquier cargo sospechoso. No esperes que el banco te avise.
- Bloquea la tarjeta y pide una reposición. No sigas usando una tarjeta comprometida.
- Cuando recibas una reposición de tarjeta, conversión, actualización o cambio en general, asegúrate de la integridad de la funda y el sobre. Recuerda que desde que la tarjeta es emitida hasta llegar a tus manos hay intermediarios que pueden violar la seguridad del sobre de la tarjeta y obtener los datos.
- Acude a la Superintendencia de Bancos. Puedes presentar una queja formal si el banco no responde adecuadamente.
- Evita contratar servicios financieros con empresas con mala reputación. Muchas veces lo barato o lo “popular” sale caro.
Conclusión
No podemos seguir confiando ciegamente en instituciones que no nos protegen. Si una empresa, sea banco o proveedora de servicios, tiene historial de estafas, cobros no autorizados y mal servicio al cliente, simplemente no hagas negocios con ellos. Hoy fue un cobro de 100 dólares, mañana podrían ser miles.
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